Quizá sea el colorido intenso de esta lantana de sol dorado de amanecida y rojo crepuscular, lo que me ha llevado a seleccionar estas dos imágenes que llenan de luz y sabor mediterráneo los días otoñales que me tienen tan alejada del mar. O quizá por el interesante visitante de sus flores. O quizá, porque su conjunto forme un todo inseparable de una evocadora estampa veraniega.
Quien bate sus alas con una asombrosa velocidad y se cierne sobre las flores para alimentarse a la manera de un colibrí -emitiendo un sonido audible-, es una robusta mariposa de la familia Esfíngidos conocida como esfinge colibrí o esfinge colibel. Es la única especie de esta familia que tiene hábitos diurnos y a la que no sólo le gusta alimentarse a las horas de luz, sino también revolotear sobre muros y paredes para solearse y sentir el calorcito del sol. Sus alas anteriores, parduzcas y con líneas y puntos negros, son de mayor tamaño que las posteriores que son color anaranjado.
Al no posarse sobre las flores cuando se alimentan, cuentan con una larga espiritrompa -casi tan larga como la longitud de su cuerpo- para poder llegar a los lugares donde cada flor aloja su codiciado néctar. Un cuerpo que es corpulento y que a primera vista puede parecer que es un gran abejorro, pero nada más lejos de ello.
Lantana. Nombre específico: Lantana camara. Familia: Verbenáceas.
Esfinge colibrí. Nombre específico: Macroglossum stellatarum. Familia Sfíngidos.
Bellísimas fotos, una armonía de colores que contrasta con la monocolor de muchos lugares en el otoño.Me ha gustado la descripción.
Guapísimas las fotografías y esa mariposa que parece una crisálida es impresionante. El otoño es curioso, en él se dan cantidad de frutas y vida diferente a pesar de ir hacia la oscuridad y el recogimiento.
Interesante lo que nos cuentas sobre ello, Isabel.
Gracias por traernos este aire veraniego al blog en unas excelentes imágenes. Yo tengo lantanas en mi jardín, son plantas que lo aguantan todo y soportan una poda en invierno importante. Luego vuelven a brotar en primavera. Y lo mejor de todo, como sus semillas y hojas tienen no sé que sustancia tóxica, está libre de plagas y yo no veo que se le acerque ningún caracol o saltamontes a comer sus hojas. Únicamente, como bien has plasmado, se acercan los insectos a las flores para hacerse con su néctar.
Me ha gustado mucho, y me entusiasma la variedad de cuanto vas poniendo. ¿Qué toca la próxima vez?
Un abrazo
Muy interesante lo de esta mariposa. Las fotografías excelentes.
Saludos.
Creo haber visto alguna vez a este bicho y nunca me imaginé que fuera una mariposa.